“Uno de nuestros compañeros y hermano del pueblo Tonokoté, Felipe Suárez, fue detenido arbitrariamente el jueves pasado –explica Angélica Serrano a lavaca desde Santiago del Estero– y hoy mientras reclamábamos en la Ruta 5 por su libertad llegó una combi de Infantería, reprimieron nuestra manifestación pacífica con golpes y gas pimienta, y se llevaron otro preso: uno de los referentes nacionales de la UTT (Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Tierra), Lucas Tedesco. Todavía no supimos nada de él”.
La foto de una humilde pancarta blanca explica con sus manchas rojas de sangre, tras la represión de este lunes, parte de lo que está ocurriendo en Bandera Bajada, Santiago del Estero. Las letras negras escritas con el apuro de la desesperación agregan textualmente: “La comunida indijena Tonoke de San Roque. No a los empresarios”.
Angélica, de la comunidad Tonokoté, habla con la ansiedad de haber vivido esa represión a golpes aromatizados con el gas pimienta policial: “Nos dijeron que mañana habrá una audiencia. Pero queremos tener noticias de nuestros compañeros, porque además están haciendo persecución sobre otros hermanos de nuestros pueblos”, cuenta en relación a los pedidos de captura contra Eulogia Godoy, Ramón Ibáñez, Ezequiel Suárez, y David Daniel Godoy, delegado de base de la UTT.
De este modo, comunidades originarias y el principal gremio campesino del país hicieron lo que Angélica define así: “Nos abrazamos para pelear juntos por nuestros derechos”.
La UTT había informado que el jueves pasado, 28 de abril, Felipe Suárez fue detenido y alojado en la subcomisaría de Bandera Bajada mientras resistía junto a integrantes de la UTT el desalojo de sus territorios en el departamento de Figueroa, provincia de Santiago del Estero. Las comunidades no fueron desalojadas pero en medio del conflicto se dictó la orden de detención contra Suárez, por parte del fiscal Miguel Torressi y la jueza de control y garantías, circunscripción Capital, Ana Maria Vittar.
“Los pedidos de captura están manipulados por el empresario Jorge Simón Karan que está hace tiempo amedrentando a lxs compañerxs poseedores de la tierra, a través de amenazas y denuncias constantes, buscando desalojar a la familias campesinas para la explotación de maderas de quebracho y carbón” explicó la UTT en un comunicado. “Hemos realizado numerosas denuncias por las maniobras violentas de este empresario pero aún la justicia no actúa y cuando lo hace es en perjuicio de quienes son históricos poseedores del terreno”.
El reclamo campesino se hace junto a la comunidad originaria, perteneciente al Consejo de Nación Tonokoté Llajtaymanta, advirtiendo “al fiscal y la jueza por la constante criminalización y persecución al campesinado a favor de los intereses de empresarios usurpadores”, planteando además: “Responsabilizamos al gobierno provincial y nacional por la integridad de las comunidades e integrantes de la organización”.
Suárez es productor, integrante de la comunidad originaria Tonokoté de Punitayoj, Santiago del Estero. Lucas Tedesco es también productor (de porcinos) y uno de los referentes nacionales de la UTT. El empresario involucrado en el conflicto es Jorge Simón Karan quien viene amedrentando a las y los campesinos poseedores, a través de amenazas y denuncias constantes. Las tierras en discusión, en el departamento de Figueroa, están en la etapa de relevamiento que corresponde para su definitivo reconocimiento a los pueblos originarios, que trabaja allí cultivando y criando animales para su sustento.
Informa la UTT: “Karan busca desalojar a los campesinos para la explotación de maderas de quebracho y carbón. Además alambra y deja encerradas a familias enteras dentro del cerco. Si bien la UTT ya ha realizado numerosas denuncias, aún la justicia no actúa y cuando lo hace es en detrimento de los históricos poseedores”.
Angélica sostiene que se trata de un problema político. “El empresario tendrá que ver con el gobierno” dice en referencia al gobernador Gerardo Zamora, de origen radical y devenir peronista, quien ya cumplió dos mandatos entre 2003 y 2013, sucedido por su esposa hasta 2017 y ahora nuevamente a cargo de la gobernación. “Es increíble que esto lo hagan los gobiernos que vota la gente” dice Angélica, mientras entra a una reunión que definirá qué pasos seguir en las próximas horas, mientras los presos siguen presos y otros indígenas y campesinos tienen sobre sí a un Estado que no brinda soluciones, pero sí pedidos de captura.